Autor: José Antonio Cotrina
Traductor: -
Editorial: Hidra
Núm. páginas: 464
Precio: 15'00€
Saga: trilogía "El ciclo de la Luna Roja" (1/3)
Traductor: -
Editorial: Hidra
Núm. páginas: 464
Precio: 15'00€
Saga: trilogía "El ciclo de la Luna Roja" (1/3)
Doce jóvenes en una ciudad que intentará destruirlos a toda costa. Una corte de seres fantásticos divididos entre mantenerlos con vida o abandonarlos a su suerte. Y todos aguardando la llegada de la Luna Roja, que desencadenará el tiempo de las pesadillas... y los milagros. Es la última esperanza del reino, la única oportunidad que le queda a Rocavarancolia de recuperar la gloria perdida. Pero es una esperanza frágil: en treinta años ninguno de los jóvenes traídos ha sobrevivido lo bastante para ser útil. En treinta años ni uno ha sobrevivido para ver la Luna Roja.
Opinión
Durante la noche de Todos los Santos, se abre una puerta interdimensional entre la Tierra y Rocavarancolia. Denéstor Tul, el demiurgo, junto con sus pájaros de tela voladores, se encarga de buscar por toda la faz del planeta a niños, niños especiales que serán llevados a la ciudad de Rocavarancolia. Allí deberán sobrevivir a una ciudad derruida y llena de peligros que intentará destruirlos.
La cosecha de Samhein parecía que iba a ser un libro más sobre jóvenes que deben sobrevivir en un lugar al que no pertenecen. Y digo que parecía, sí, en pasado, porque las apariencias engañan, nunca mejor dicho... El autor nos adentra en un fantástico mundo repleto de monstruos, objetos con vida (catalejos que vuelan, espantapájaros parlanchines, bañeras flotantes...) y niños de no más de 16 años que se ven inmersos en una aventura muy distinta a lo que Denéstor Tul les prometió en un principio, antes de arrancarlos de sus hogares y reunirlos a todos en una ciudad desconocida hasta para sus propios habitantes. En Rocavarancolia nada es lo que parece ser y las sombras acechan en cada esquina esperando quién será su próxima presa.
Este libro me ha atrapado por su original ambientación. Quizás no me ha enganchado tanto como yo esperaba, porque en la primera mitad del libro no conseguía meterme de lleno en la historia por varias razones y fui intercalando otras lecturas. En primer lugar, el ritmo es pausado y carece de mucha acción hasta casi la segunda mitad. Además, no he llegado a conectar del todo con los personajes (ni siquiera con el protagonista), ya que para tener la edad que tenían, entre 13 y 16 años, hablaban como si fueran adultos; y al haber tantos niños, al principio estaba un poco liada con los nombres, la edad y la nacionalidad. Creo que me esperaba algo mucho más terrorífico y trepidante, con personajes menos infantiles y más giros en la trama. Sin duda, lo que más me "chirriaba" al inicio era la intención del autor de casar terror y niños en una misma historia. Aun así, hacia el final, los niños maduran y se nota que se adaptan a la situación.
¿Demasiado introductorio para ser un comienzo de saga? Puede, aunque al final te llevas más de una sorpresa que te dejará con ganas de seguir leyendo. Introducirnos en un mundo tan bien creado y tan original no es tarea fácil. Todo resulta creíble, desde los monstruos hasta los escenarios. Este escritor tiene una imaginación desbordante, de eso no cabe duda. Un punto a favor para el autor es que ha alternado la narración: unas veces desde el punto de vista de los niños y otras desde el de los adultos. Así vas descubriendo cosas que un bando sabe y el otro no. Otro aspecto positivo es el protagonista, Hector, que no es el arquetipo de héroe que todos imaginamos, cosa que añade un toque especial a la historia. No hay romance, cosa que agradecí, aunque se da pie a ello y es probable que en los próximos libros surja alguna pareja.
En resumidas palabras, este comienzo de trilogía promete muchísimo, no era lo que esperaba pero lo que me he encontrado ha sido una grata sorpresa. Una pena que por ahora no pueda continuar, tendré que esperar a que compren los dos siguientes libros en mi biblioteca para averiguar qué les depara Rocavarancolia a los niños.
Valoración